PRÓXIMAS RUTAS

lunes, 30 de diciembre de 2019

MAYO DEL 2015 CUANDO FLORECIÓ EL DESIERTO



Al hablar o referirnos al desierto del Atacama, en el extremo en donde se encuentra inmersa la ciudad de Antofagasta-Chile, la imagen que se nos viene a la memoria es una sola, vastos territorios desolados y de una carencia total de vida. En parte, tienen toda la razón, aunque no es la realidad absoluta de toda esta región.


En este territorio hay espacios muy delimitados que mantienen vida, especialmente en la cordillera costera (espacios llamados relictos) y muy especialmente en las zonas precordilleranas, en la altiplanicie. Pero, han habido momentos en donde este territorio cambió de color, del tradicional ocre al verde de la vida y hubo una oportunidad – muy reciente – en donde nuestro desierto floreció a plenitud. Fue durante el año 2015 cuando en un día, cayó toda la lluvia que debía caer en 14 años, lo que dió lugar a esta maravilla.

Para vuestro conocimiento, Según la información de la Dirección Meteorológica de Chile, el promedio anual de caída de agua en la ciudad es de 1,7 milímetros promedio, sin embargo, ese día 25 de marzo cayeron 24,4mm superando en 1.435% la media.



He de contarles que las primeras gotas comenzaron a caer un martes 24 de marzo y en poco tiempo, se transformaron en un temporal que convirtió a las regiones áridas de Antofagasta, Atacama y Coquimbo, en el norte de Chile, en un lugar irreconocible.

¿Pero cómo es posible que esta zona tradicionalmente desértica se haya convertido en un lodazal? ¿A qué se deben estas lluvias repentinas y devastadoras?

Lo que sucedió en este caso, fue un tipo de tormenta que no es tan frecuente y que se denomina baja segregada. Esto es un núcleo de aire frío en altura que se desprende del flujo principal de los vientos del oeste y que se enfrenta con masas de aire cálido y cargadas de mucha humedad que vienen desde la cuenca amazónica. Esta combinación provocó una intensificación de las lluvias y desencadenó los aluviones en norte del país. Las bajas segregadas tienen lugar una o dos veces al año y siempre que ocurren tienen un efecto significativo, como una tormenta de viento o una nevazón inesperada, pero en la parte alta de la cordillera. En esta oportunidad se manifestó con precipitaciones muy intensas porque un hubo un aporte de humedad de la zona más tropical".

Según los estudios, ésta no es la primera vez que ocurre ni será la última que lloverá de esta manera en el Atacama, es cosa de recordar los eventos del año 1991 y 1997.

Lo que vino después de estas lluvias fue una maravilla de la naturaleza cuya belleza, permitió aminorar las calamidades y las tragedias ocasionadas por este evento (en vidas y en bienes materiales). El desierto floreció cubriendo los cerros de toda la extensa cordillera costera, llenando de mágicos colores y de gratos aromas los espacios de vida silvestre de toda la región y en donde cientos de especies (flora) despertaron de su letargo, asomando a la vida luego de décadas de letargo por la extrema aridez. Un evento que se volvió a repetir (en mucho menor grado) el año 2016, 2017 y 2019.

Los antofagastinos ya nos vamos acostumbrando a convivir con las flores del desierto, los estudios lo dicen "con el cambio climático, estos fenómenos se producirán con más frecuencia".





















domingo, 29 de diciembre de 2019

EL GALEÓN DE ANTOFAGASTA



Levar anclas y soltar las velas marineros de agua dulce… Llegó el momento de navegar a la eternidad.



No fue la braveza del mar, fue el viento quién definitivamente se llevó las cenizas de un gran ícono de Antofagasta. Un navío que aún navega en los mares del recuerdo y en la memoria de los antiguos antofagastinos.

La historia popular – mitad mito y mitad leyenda - nos dice que, por el año 1956, ya se hablaba de un Galeón en Antofagasta, que luego de haber hechos largas travesías por el océano y haber servido a una desaparecida empresa comercial, se encontraba totalmente abandonado a orillas de la playa, la propietaria era una familia que no pudo o ya no quiso volver a reflotarlo.

Este navío es adquirido por un conocido empresario local de nombre Juan Castillo, quien (literalmente) lo salva del progresivo deterioro que lo afecta y decide convertirlo en un novedoso lugar de entretenimiento.

En un principio, este barco estuvo ubicado donde termina la calle Bolívar, pleno centro de Antofagasta, a orillas del mar y a un costado del muelle fiscal. Era bar, restaurante y también Discoteca, un lugar muy visitado por el público especialmente los fines de semana y que se transformó en un “Gran atractivo Turístico” para la región. Lugar de reunión familiar y punto obligado del escaso turismo de aquella época.  

Calles Bolívar-Balmaceda

 Nada es eterno, especialmente en ciertos lugares.

El Galeón duró en el centro hasta el año 81-82 año en el que fue trasladado al sector norte de Antofagasta, al sector conocido como Playa El Trocadero, donde quedó montado sobre una sólida base de piedras y cemento.

Galeón en Playa Trocadero

En el lugar, siguió funcionando como Bar Restaurante y se accedía a él a través de un puente de madera pintado de blanco que permitía un ingreso ordenado y en un cálido ambiente familiar. Pese al lugar, la gente lo convirtió en su favorito y La Playa “El Trocadero” comenzó a ser conocida por los veraneantes como la "Playa del Galeón", más, la lejanía y el sector hicieron decaer el negocio hasta que tuvo que cerrar definitivamente sus puertas, quedando uno de sus marineros a su cuidado (tuvimos la fortuna de conocerlo).

Lo que nos consta.

No hubo interés por parte de las autoridades de la época por dar un verdadero y definitivo impulso a los proyectos turísticos de entonces, por lo cual esta reliquia quedó en total desamparo y destinado a un trágico final. La playa en la cual se encontraba no contaba con algún tipo de iluminación o de protección y en las noches, bajo el alero de la oscuridad sirvió para amparar todo tipo de vandalismo.



En sus últimos días de existencia, el Galeón de Antofagasta se convirtió en una guarida de drogadictos. Fue así, como en un momento y en tan solo unos minutos, este hermoso navío desapareció entre las llamas producto de una quema, controlada por bomberos a petición de la Junta de Vecinos de las Rocas, para evitar que siguiera siendo guarida de drogadictos y tomadores.





LA ANTIGUA CONTAMINACIÓN DE ANTOFAGASTA



La contaminación oculta de nuestra ciudad y de nuestra comuna

Dejamos en claro que este escrito - de nombre revelador - no lleva por finalidad el levantar clamores populares, desgarrar ropajes o implorar la excomunión ipso facto incurrenda para los causantes. Es para dejar en claro que, aquello que se realiza por décadas e inclusive centurias, no se puede solucionar en un día y resulta más económico (incluso en la actualidad) verter los deshechos que tratarlos, por lo cual, reparar o remediar el daño tiene un costo que, en más de las veces, es inasumible por los entes encargados, siempre y cuando estos entes encargados y sus jefaturas pongan atención a estos y otros temas de contaminación y no sigan mirando al cielo esperando que les hable el altísimo (para los creyentes).

Primeras fundiciones de Antofagasta en borde costero
Fundición Bellavista-Fundición Templeman

Recuerden. Antofagasta nació como un poblado minero-industrial, en épocas donde no había regulación ambiental alguna y en donde cada empresa y cada persona miraba la naturaleza (tierra, aire, mar) como un surtidor de bienes y un vertedero a mano.

Ahora bien. En la última reunión de este 2019 del Concejo Municipal Medio Ambiental efectuado hará una semana atrás en Antofagasta-Chile, se pidió el apoyo (ayuda) a las instituciones participantes para realizar el “Catastro base de la contaminación” en los diversos sectores de nuestra ciudad, algo así como un mapeo en donde hubo contaminación o aún es posible encontrar pasivos ambientales que puedan representar riesgos para la población. Se nos dijo que se haría llegar un adelanto con los sectores ya catastrados y que, la comunidad, podría aportar con otros que se mantienen invisibilizados.  

Vemos con agrado que en nuestra casa consistorial se estén tocando estos temas y también hemos de acotar (con mentalidad límpida) que esta es una gran idea que puede afectar a algunos - en temas de plusvalía - y beneficiar a otros, pero, es un levantamiento muy necesario y nos plegaremos - con nuestro escaso conocimiento - en su desarrollo. 

Basados en la historia y que no debe ser muy distinta a la que ustedes manejan. 

Desde el sector de Playa Paraíso al norte (por el borde costero) toda esta extensión fue un poderoso enclave industrial y minero, en donde todo el remanente iba directamente al mar. Que dice la historia. Desde los albores de Antofagasta fue posible encontrarnos con aproximadamente 5 faenas mineras instaladas aledañas al borde costero con sus respectivas moliendas, la mayoría de mineral de cobre y un par de ellas con oro (tema de Mercurio), también recuerdo haber visto una molienda justo al final de la avenida Nicolás Tirado/costanera. 

De igual manera, fue muy visible la contaminación en las cercanías de la isla Guamán (al norte de la ciudad) donde se encontraba una planta de tratamiento de minerales de oro provenientes de la cercana mina Jotecito. La mancha rojiza en aquella bahía era evidente para todos los visitantes y especialmente para los antofagastinos. 

La actual población Los Pinares, antigua Punta Brava, era en sus inicios un basural que se encontraba a pocos pasos del mar, cuando esta costa tenía eventos de bravezas, esta basura era arrastrada y dispersada por la bahía. También tuvimos ciertas referencias que hablan de muertos y enterrados por pestes en las cercanías del cementerio, estos acabaron por estos lados (testimonios) ya que, era más fácil dejarlos en el lugar y no acarreaba tanto trámite.

Sector Las Petroleras. Los estanques de combustible y de lubricantes ¿Saldrán del lugar en algún momento? No me digan que hay una orden judicial la cual dice que deben salir, del dicho al hecho hay harto trecho.

Sector Petroleras

¿Cuándo se establecieron los ductos que vertían las aguas servidas al mar?
 
De esto no tenemos referencia alguna, pero si sabemos que, aquellos ductos estuvieron por décadas (y aún están) en los tiempos en donde no había control alguno o prohibiciones de aquello que se podía arrojar en la red. 

Se insiste, todo iba al mar

Las Pesqueras. Fueron parte del progreso y de los aromas de Antofagasta por muchos años, tuve la posibilidad de recorrer sus instalaciones abandonadas allá por los años ´80 y eran grandes edificaciones en enormes terrenos que me permitieron el hacerme una idea de la gran cantidad de desperdicios y remanentes que se vertían al mar producto de sus procesos. Recuerdo que para los años ´70 visitar las poblaciones que se encontraban sobre estas instalaciones, era muy molesto (por los aromas) situación que deben recordar los antiguos vecinos del lugar (El Golf, Lautaro, Prat B)

Casi en el centro de la ciudad, apenas saliendo a la periferia, hay una población edificada sobre un cementerio y los muertos del lugar no tuvieron una muerte tradicional, murieron por enfermedades altamente contagiosas. 

Los Patios de acopio del Ferrocarril.

Se podría decir mucho sobre esta empresa y sus espacios de acopio, pero sin los antecedentes mínimos, se escucharía más como una especulación que, como algo serio, pero es claro su aporte al pasivo peligroso de nuestra comuna, especialmente por el plomo. 

Cercanos a la avenida Brasil estuvo una planta de tratamientos de agua servida, ahora (en el lugar) hay grandes edificaciones.

Más al sur nos encontrábamos con bastante cascarria de minerales que tuvieron un proceso y todo quedó en el lugar, pero hubieron espacios que fueron urbanizados y poblados (no todos) más, procurar saber si hubo remediación de estos terrenos (en tiempos del cólera) como dice la obra, es difícil. Difícil el saber o emitir un juicio.  

Un caso emblemático que tuvo que remediarse a costa de mucha inversión, fueron los pasivos de la Fundición Huanchaca, en donde actualmente se levanta El Casino.

Antigua imagen de la Fundición Huanchaca

Llegando al final del tema. 

Hemos encontrado en las quebradas cercanas, inmediatas a la ciudad, grandes contenedores sellados que presumiblemente contienen químicos diversos, en su momento nos comunicamos con los encargados y con los que vendieron dichos reactivos, más, como siempre la respuesta de rigor “Mañana les respondo” y nunca más fue. Esos toneles en algún próximo evento lluvioso llegarán a la ciudad y pueden provocar más de algún inconveniente, pero – como nos dicen – preocúpense del hoy, ya mañana veremos que se hace. 

Algunos pozos aún contienen ácido. Mina abandonada quebrada El Toro

Se insiste, la contaminación histórica en la ciudad no incluye los sectores aledaños, como por ejemplo el km 12. Sector en donde un antiguo proceso minero dejó sus remanentes, con sus químicos incluidos, totalmente abandonados (Un peligroso pasivo ambiental), tampoco hablaremos de los sectores industriales que rodean nuestra ciudad, especialmente el Sector La Negra o de todas las faenas mineras que existieron por estos lares y que nos heredaron sus ripios, sus peligrosas excavaciones y alguno que otro elemento que consideramos nocivo en la actualidad.

 Tambores de ácido abandonados en las quebradas
Contenedores de químicos, no sabemos cual químico contienen

Quise dejar para el final el sector Coloso, bastión de una gran minera que – ante la cual – muchos doblan cerviz, cadera y rodilla en obediente procesión. La contaminación y el daño que ha generado y que seguirá generando esta minera en todo el trayecto en donde marca presencia (desde los salares, al desierto y finalizando en la costa) es incalculable, irrecuperable e imperdonable, es cosa de ver el daño en la costa, la enorme laguna de ácidos a un costado del Coloso, las lagunas del interior y lo más patético, la destrucción de espacios de vida silvestre, como el salar de Punta Negra, todo esto con la ayuda de los que debiesen proteger, cautelar, este salar fue negociado y entregado en silencio, aunque se llamó a algunos para aplaudir (lavar imagen) desde esa fecha que Caminantes del Desierto quedó en la lista negra, al decirle a la repartición del estado que se había vendido, He ahí la verdad del porqué somos invisibilizados y en más de las veces menoscabados. No perdonan el que les dijésemos la verdad de manera directa.

Laguna de ácido sector Coloso

No estamos en contra del progreso, del bien llamado desarrollo del país y del desarrollo personal, pero es nuestra pretensión y solicitud (basados en la ley) que este desarrollo sea amigable con nuestra naturaleza, que los recursos que se usan en comprar conciencias, se usen en una producción más limpia, está la tecnología, están los profesionales, están las ganas de hacerlo, solo hace falta la voluntad de los actores directos, la probidad necesaria de los que deben cautelar y sacar de una buena vez a los menesterosos que han lucrado en silencio con la salud y la naturaleza antofagastina.

jueves, 26 de diciembre de 2019

EL ATACAMATITAN CHILENSIS



Nos cuesta imaginar un territorio tan distinto al que observamos en la actualidad, un desierto considerado casi absoluto en su parte media, que antaño, hará unos millones de años atrás, estuvo cubierto por el mar, con una increíble vida acuática, con enormes monstruos sobrevolando los cielos y con grandes dinosaurios caminando por los bordes costeros de este norte de Chile. Más aún, cuesta el imaginar que este paisaje estuviese cubierto por grande y extensos bosques de coníferas, algo que nos ha de parecer surrealista o fruto de una ilusión, pero que, según los estudios, fue muy real. 

Pues bien. los grandes dinosaurios caminaron por estos suelos y uno de ellos resultó ser muy único. El Atacamatitan chilensis.


El Atacamatitan ("titán de Atacama") es un género de dinosaurio herbívoro - saurópodo titanosáurido - que vivió a finales del período Cretácico, hace aproximadamente 70 millones de años durante el Maastrichtiano (la última edad o piso del periodo Cretácico), en lo que es hoy Sudamérica.

Este individuo (especie) se conoce por el holotipo (SGO-PV-961), que incluye dos vértebras dorsales, vértebras caudales, costillas, un posible esternón, parte de un húmero, el fémur derecho, y huesos no identificados incompletos. Este espécimen fue encontrado en la Formación Tolar. 

El lugar del descubrimiento está cerca de la ciudad de Conchi Viejo, en la Región de Antofagasta. Fue nombrado por Alexander W.A. Kellner, David Rubilar-Rogers, Alexander Vargas y Mario Suárez en 2011 y la especie tipo es Atacamatitan chilensis. El epíteto específico chilensis se refiere a Chile.


Atacamatitan chilensis

Este dinosaurio gigante o titanosaurio, llegaba a las cinco toneladas de peso y ocho metros de longitud. "Su particularidad fue diagnosticada a partir de vértebras del dorso, cola y por la forma del fémur, más esbelto que cualquier titanosaurio ya descubierto".

Los restos del animal fueron hallados en el año 2000 en el desierto de Atacama, uno de los lugares más áridos del mundo con períodos sin lluvias de hasta 300 años. Pero los científicos creen que en el período cuando fue habitada por los dinosaurios, la zona ofrecía en abundancia varias especies vegetales, entre ellas la araucaria (tema del que hablaremos al final de este escrito), especie de cuyo fruto llamado “piñón” se alimentaba este gigante.

Esta es la primera vez en que científicos descubren un antiguo saurio que vivía precisamente en el territorio del Chile actual y han perpetuado este hecho 2 veces en el nombre de la especie: con la denominación del país y del lugar donde fue encontrado.
Pero hay algo que debe llamarles la atención, y es, la gran presencia de fósiles marinos en este norte por sobre los otros vestigios.

Pues bien. Hubo un tiempo en el pasado geológico en el que la cordillera de los Andes no existía y en su lugar había un mar en el margen de un gran paleocontinente llamado Gondwana. Durante ese periodo, llamado Jurásico, que transcurrió entre 200 y 145 millones de años atrás, los grandes dinosaurios caminaban por la tierra, en el cielo era posible divisar pterosaurios en pleno vuelo y en el mar la vida rebosaba de seres vivos muy distintos a los que vemos hoy en día y que habitaban aquellas aguas:
Amonites, belemnites, gastrópodos, bivalvos, corales, también ictiosaurios, plesiosaurios y peces formaban un mosaico de vida de enorme diversidad.

En definitiva, hace millones de años atrás, este territorio era un océano, pero, según los estudios, no fue siempre así:



El porqué de la presencia de Dinosaurios al interior de nuestra región.

La Tierra tiene una antigüedad estimada entre 4.600 millones y 5 mil millones de años, período en que los expertos dividen en eras: Precámbrica (4.600 a 570 millones de años); Paleozoica (570 millones de años); Mesozoica (225 a 65 millones de años), y Cenozoica (a partir de 65 millones de años). Durante este tiempo gran parte de Chile estuvo cubierto por el mar, lo que explica la existencia de fósiles marinos como corales y algas.

La excepción está en el Mesozoico, ya que hace 120 millones de años, entre el Jurásico y el Cretácico (dos de los tres períodos que dividen esa era), el Norte Grande estuvo sin mar.



Jurásico

El periodo Jurásico es el segundo de los tres periodos geológicos de los que se compone la Era Mesozoica, y se extiende desde hace aproximadamente 199 millones de años, hasta hace 145 millones de años. Este periodo se caracteriza por la hegemonía de los grandes dinosaurios y también porque fue un periodo de profundos cambios en cuanto a los cambios producidos en la disposición de los continentes. Dentro del periodo Jurásico también podemos distinguir distintas subdivisiones.

El más espectacular desarrollo geográfico del Mesozoico fue la fragmentación de Pangea y la mayor parte de este proceso tuvo lugar a lo largo del periodo Jurásico. 

A finales del periodo Jurásico, Pangea se había dividido en dos supercontinentes: Laurasia, en la zona septentrional, y Gondwana, en la parte meridional. También destacan las grandes oscilaciones en el nivel del mar. Durante este periodo tuvo lugar una gran elevación en el nivel del mar que provocó la inundación de grandes zonas de América del Norte y de Europa.

Pangea

El clima seguía siendo cálido durante este periodo, pero debido a la fragmentación de Pangea, éste se vio afectado por el Océano: descendieron un poco las temperaturas y, además, el clima se volvió bastante más húmedo. Estas nuevas condiciones ambientales favorecieron al desarrollo de junglas y extensos bosques de coníferas acompañadas de diferentes tipos de helechos y palmeras.

Entonces, en aquellos años de volcanes, selvas, mares y extraños animales, el océano cubría gran parte de lo que es hoy nuestro territorio. Sin embargo, el Norte Grande, nuestra casa, estuvo durante largos períodos sin la presencia de agua y estas especies (dinosaurios) podían migrar y/o desarrollarse, porque no existía cordillera.

Sobre el tema de la Araucaria existente en los sectores internos de la región, siempre se nos había dicho que se trataría de la Araucaria araucana, hasta que llegó a nuestras manos un dossier que deja en duda dicha afirmación y que procuraremos abordar en otro escrito. Hemos de agregar que sobre este tema y sobre el tema paleo botánico, solo somos meros escribanos, por lo cual, dejamos los enlaces de referencias para disipar las dudas, enlaces que anexamos al final del escrito.

Tener muy presente:

El Consejo de Monumentos Nacionales es el organismo que se ocupa de la protección de todos los fósiles de Chile, ya que cada uno de ellos es un Monumento Nacional.
No se puede recolectar fósiles sin permiso y además, sólo los paleontólogos pueden hacerlo.

REFERENCIAS:

El Mundo Perdido

La Fauna Prehistórica

El Atacamatitan








miércoles, 25 de diciembre de 2019

LOS ESCORPIONES DE ANTOFAGASTA



Su presencia en la naturaleza, de Antofagasta-Chile, es imperceptible, aunque estamos en el lugar correcto para encontrarnos con ellos, con los temidos escorpiones y en pleno desierto del Atacama. 

Su hábitat es variado y comprende gran parte de la franja litoral, la cordillera costera (especialmente en los oasis de niebla) algunos sectores de las zonas desérticas absolutas (en los límites) y en todos los sectores precordilleranos. La cercanía con la gente es debido al crecimiento de la población, situación que obliga al sapiens-sapiens a ocupar territorios que antaño eran considerados corredores biológicos, espacios de la vida silvestre.


Ahora bien. Dar con ellos en esta naturaleza no es fácil, hemos de voltear muchas piedras y rocas o bien, desarmar las carpas (en actividades de acampada) para encontrarlos bajo de estas.

Ante su presencia, el pánico se apodera de inmediato de la gente (especialmente en los citadinos estrictos) al pensar que estos pequeños minúsculos tomarán impulso y atacarán de manera violenta, blandiendo su aguijón, e inyectando su veneno de forma indiscriminada. Como si estos pequeños tuviesen el tiempo, la energía y la antojadiza posibilidad de gastar su veneno en todo aquel que se cruce por su camino.

La pregunta que siempre se hace, estamos ante ¿Escorpiones o Alacranes? Son de hecho el mismo animal, aunque existen personas que aún piensan – y lo hemos comprobado - que los nombres dependen de la especie y/o de su ubicación geográfica. Esto quiere decir que su nombre cambia de alacrán a escorpión dependiendo del lugar en el que se encuentren. También se da por cierto que la diferencia entre alacranes y escorpiones radica en su veneno y el daño que este puede provocar a una persona, sin embargo, no existe una diferencia científica basada en esta característica.

Pues bien, he aquí la sutil diferencia.

Escorpión (deriva del latín scorpio) y Alacrán (del árabe al'aqráb) es, como lo habrán podido comprobar, es solo un tema de nombres para un mismo orden de artrópodos de la clase de los arácnidos.



Biología

Los escorpiones o alacranes - Clase Arachnida, Orden Scorpionida - son especies benéficas, Se conocen unas 1.753 especies en el mundo y 45 presentes en nuestro país de las cuales 32 son endémicas y 13 no endémicas (el número varía de acuerdo con ciertos investigadores), todas ellas pertenecientes a tres familias (en Chile):

-        Bothriuridae (desde II Región a Aysén)
-        Luridae (Tarapacá a V Región)
-        Buthidae (Arica a Malleco).

La vida y la muerte en Antofagasta-Chile. La delgada linea del desierto. 

Son los arácnidos que alcanzan el mayor tamaño, aproximadamente los 20 cm. Además, de sus 8 patas ambulatorias tienen un par no ambulatorio, que en los machos participa en el proceso de reproducción. En su cabeza tienen unos enormes quelíceros provistos de tenazas. Su cola está compuesta por seis segmentos que terminan en un aguijón fino y curvo, donde se aloja el conducto del veneno.

Con los quelíceros y pedipalpos sujetan a su presa para enterrarle el aguijón e inocularle el veneno. Se alimentan de insectos y arañas y también pueden presentar canibalismo.

Son vivíparos, es decir la hembra produce crías vivas (10 a 35), las que transporta sobre su dorso por 7 a 30 días o hasta su primera muda. Las ninfas pasan por 6 mudas hasta alcanzar su estado adulto, lo que puede tomar varios meses e incluso 4 años.

Los adultos pueden vivir de 1 a 6 años. La partenogénesis (reproducción sin fertilización) ocurre en algunas especies de escorpiones.

Hábitos

Las especies de escorpiones presentes en Chile son inofensivas – según los expertos - de tamaño relativamente pequeño, de 3 a 5 cm. En algunos países latinoamericanos la picadura por escorpiones es un serio problema de salud pública, sin embargo, en Chile no se reportan muertes de personas por picada de escorpiones.



Habitan principalmente en zonas cálidas y áridas. Durante el día se refugian bajo piedras, trozos de leña, corteza de troncos, escombros, hojas y en la noche son muy activos en la búsqueda de alimento. En los meses calurosos del verano buscan sitios más frescos, pudiendo ingresar a las viviendas y ocultarse en cocinas, baños, entretechos, en el interior de calzado, etc. Si se ven amenazados o son molestados intencional o accidentalmente pueden provocar una picadura comparable en dolor a la de las abejas o las avispas, siendo más grave en el caso de personas hipersensibles.

Mecanismo de fluorescencia

Todos los escorpiones emiten una fluorescencia cian (con una longitud de onda entre los 440 y los 490 nanómetros) cuando se iluminan con luz ultravioleta. Este fenómeno fue descubierto casi simultáneamente en 1954 por el zoólogo italiano M. Pavan y el zoólogo sudafricano R. F. Lawrence y revolucionó el estudio de la biología y ecología de los escorpiones gracias a que fue posible localizarlos y observarlos por la noche usando lámparas de luz negra.



La intensidad de la fluorescencia aumenta con la edad del escorpión y la dureza de su cutícula y es más brillante en las zonas más duras. Por lo general, durante la primera fase del desarrollo de los escorpiones (antes de la primera muda), la fluorescencia es débil o inexistente y la van desarrollando sobre todo a partir de la tercera muda. Cuando muda un escorpión, la exuvia (cutícula vieja) mantiene la fluorescencia, mientras que la nueva cutícula blanda no es fluorescente y va adquiriendo sus propiedades fluorescentes a medida que se endurece (esclerotización). Esto sugiere que los compuestos fluorescentes se segregan nuevamente después de la muda o se forman durante el proceso de endurecimiento. Una vez adquirida, la fluorescencia persiste incluso después de la muerte de escorpión.

La fluorescencia se debe a la existencia de dos compuestos químicos en la cutícula: βcarbolina y 7-hidroxi-4-metilcumarina. Estos dos compuestos se encuentran en la exocutícula hialina, una región de la cutícula que en los escorpiones tiene un espesor de 4 micras. La cutícula es una especie de «piel» que protege a los artrópodos y al estar endurecida, también actúa como armazón que les permite mantener su forma. En los escorpiones, la cutícula está formada por la epicutícula, una capa fina y externa, la exocutícula, dividida a su vez en dos capas, la exterior o exocutícula hialina y la interior o exocutícula interna, y la endocutícula.

Las β-carbolinas se encuentra en plantas y animales. Algunos derivados actúan como alucinógenos y son uno de los compuestos presentes en las cataratas humanas. En los escorpiones, se cree que se forma como resultado de las reacciones químicas que provocan el endurecimiento de la cutícula.

Las cumarinas son casi exclusivas de las plantas, aunque se pueden encontrar también en hongos, bacterias, algunos moluscos y en las glándulas odoríferas de los castores. De momento, no se ha encontrado ninguna cumarina en otros artrópodos.

Funciones de la fluorescencia

La función de la fluorescencia de los escorpiones es uno de esos grandes misterios evolutivos que aún permanece sin resolver. Al ser animales nocturnos que evitan exponerse a la luz directa del sol, la función biológica de la fluorescencia es, cuanto menos, intrigante (aunque de una enorme utilidad para los que se dedican al estudio de los escorpiones). Aun así, se han propuesto varias hipótesis entre las que figuran la comunicación y el reconocimiento, para mejorar su agudeza visual, para atraer a sus presas, para evitar a los depredadores o para la detección de luz ultravioleta.

Los descubridores de la cumarina sugieren que los compuestos fluorescentes pudieron servir como filtro solar para bloquear la radiación ultravioleta. Aunque esta adaptación pueda resultar chocante en los escorpiones modernos por sus hábitos nocturnos, es posible que los primeros escorpiones que conquistaron la tierra durante el Devónico harán unos 400 millones de años, fueran activos durante el día. 

La exocutícula hialina aparece en los fósiles más antiguos de escorpiones y debido a su estabilidad, es la única capa de la cutícula que se preserva (de hecho, en los fósiles bien conservados de hace varios cientos de millones de años es posible observar algo de fluorescencia). Durante la transición a la tierra, la protección frente a la radiación ultravioleta pudo conferirles una importante ventaja evolutiva. Además, se sabe que las cumarinas actúan como filtro solar en las plantas en desarrollo.

También es posible que la fluorescencia sea simplemente un subproducto del endurecimiento de la cutícula y que no tenga ninguna función biológica.






REFERENCIAS:

Escorpiones de Chile

Comunidades de escorpiones del desierto costero transicional de Chile.

Escorpiones o Alacranes

Mecanismo de fluorescencia
Ultraviolet light detection: a function of scorpion fluorescence. Carl T. Kloock, Abraham Kubli y Ricco Reynolds. 2010. Journal of Arachnology 38(3), pp. 441-445.