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LOS LAGARTOS DE LA CORDILLERA COSTERA DE LA COMUNA DE ANTOFAGASTA-CHILE



Los Lagartos de la Cordillera Costera de la Comuna de Antofagasta-Chile



     Nuestra intensión e interés como institución es uno solo. Mostrar a la comunidad en general las diversas especies de lagartos que habitan la cordillera costera de nuestra región. Específicamente en la comuna de Antofagasta.  Tenemos muy presente que no contamos con la experticia y el conocimiento requerido, Además nuestra región no cuenta con muchos estudios sobre el tema y estos a su vez, van sufriendo constantes modificaciones. Por lo tanto. Nos basaremos en el trabajo del Museo de Historia Natural “Distribución Geográfica de las Especies de Lagartos de la región de Antofagasta” realizado por los profesionales Herman Núñez y Alberto Veloso. Cuyo objetivo fue el de explicar la composición taxonómica y patrones distribucionales en nuestra región bajo la hipótesis que los diferentes ensambles de lagartos tienen diferentes orígenes biogeográficos resultando en patrones reconocibles de distribución.



     Según este estudio. Los reptiles terrestres conocidos (Sauria) de la Región de Antofagasta son treinta y tres especies con un número aproximado de 15 especies presentes en la cordillera costera en toda su extensión pertenecientes a Tropiduridae (sensu lato, véase Núñez et al. 2001), Gekkonidae y Teiidae.



Patrones Actuales de la Distribución Geográfica de los Lagartos

     La Segunda Región de Antofagasta es la más grande división política de Chile, alrededor de 400 km desde la península de Mejillones hasta la frontera argentino-boliviana-chilena y desde el norte hasta el sur corre desde los 21º5’ de latitud hasta los 26º. Topográficamente, en el oriente, la cordillera de los Andes alcanza elevaciones de alrededor de 6000 mts; en la mitad, la cordillera de Domeyko cruza con orientación norte-sur, y en el occidente, paralelamente y flanqueando la costa antofagastina, la cordillera de la Costa, con una altitud media de 2.000 mts. Los paisajes son dominados por valles, salares, cimas montañosas, áreas arreicas y endorreicas y cuencas de ríos. La Segunda Región es parte de la “Diagonal xérica”, un ecosistema mayor, que corre desde el sur del Perú hasta Atacama, y al lado occidental de los Andes hasta la Patagonia.




PATRONES BIOGEOGRÁFICOS Y EVENTOS HISTÓRICOS

     Aunque no existen evidencias paleontológicas de la presencia de los actuales lagartos en las regiones desérticas del norte de Chile, Perú o el altiplano, las historias tempranas de los Gekkónidos, Teiidos y Tropidúridos pueden ser trazadas hasta el Cretácico tardío. De acuerdo al registro fósil, Albino (1996) señala que la distribución de Squamata era más amplia que hoy durante el Cretáceo y durante casi todo el Terciario, debido a condiciones ambientales más homogéneas. En nuestra opinión, el evento orogénico más importante es la apertura del paso de Drake en el Oligoceno y Mioceno temprano, originando la corriente de Humboldt que era cálida (Martínez Pardo y Martínez-Guzmán 1997). Durante el Plioceno la corriente de Humboldt se hizo más fría con severos cambios en la fauna de moluscos marinos, desde una comunidad tropical a una austral (Zinzmeister 1978). Este proceso determina un activo proceso de desecación (Muizon y Devries 1985) con retracción de flora tropical y avance hacia el norte de flora austral. Al mismo tiempo, una intensa actividad volcánica produjo un gran incremento de la ascensión de la cordillera andina que alcanza su altura actual. 



     Las condiciones más frías desarrolladas durante el Terciario superior culminan en las glaciaciones cuaternarias que se caracterizan por alternancia de condiciones áridas y húmedas (Arroyo et al. 1988) con consecuencias en la distribución de elementos de la flora y la fauna. Se puede adelantar una explicación sintética para dar cuenta del origen de los lagartos que actualmente habitan en la Segunda Región considerando los cambios orogénicos y climáticos señalados para el área. El principal factor orogénico es el levantamiento de la cordillera andina, y el posterior un enfriamiento producido por la corriente de Humboldt. 



     El proceso orogénico determina la formación de nuevos ambientes andinos y la fría corriente de Humboldt determina a su vez la desecación de un extenso territorio en el Norte de Chile y el Sur del Perú. El levantamiento y la progresiva desecación alcanzan su máximo durante el Cuaternario con la formación del Desierto de Atacama que conocemos en la actualidad. Esto propiciaría la dispersión de los lagartos hacia ambientes mésicos de la cordillera y precordillera andinas, a lo largo de la cuenca del río Loa y de los diferentes oasis y valles con agua permanente que se encuentran en la actualidad. Los hábitats de la costa, también sufrieron fragmentación determinada por condiciones xéricas, promoviendo el aislamiento y la subsiguiente especiación de Microlophus, Garthia y Callopistes. 


    Tanto el levantamiento de las tierras, así como los procesos de desecación produjeron una matriz inicial de relaciones ecológicas entre las poblaciones ancestrales, permitiendo, además, la ampliación de la distribución (dispersión) de taxa, en nuevos ambientes y promoviendo la especiación a mayores altitudes (por sobre 2500 m.s.n.m.).


     Adiciones y sustracciones de especies de una región pueden ser afectadas por diversos procesos: especiación, extinción, dispersión biótica y dispersión a distancia (Cracraft 1994). La especiación y la dispersión biótica se traducen en conjuntos de especies estructuradas jerárquicamente en un sentido Linneano, en tanto que la dispersión a distancia resulta en conjuntos desestructurados de especies. La especiación en los nuevos ambientes colonizados, y la dispersión biótica parecen ser el principal proceso operante en la fauna de lagartos de Antofagasta.



     Anexo importante: Según Los sedimentos del Mioceno Temprano de la Formación Sarmiento en Gaiman, provincia del Chubut (Argentina) proveyó una de las más importantes colecciones de escamosos del Mioceno, incluyendo iguanios, teidos, boideos y colúbridos. Restos fragmentarios de iguanios asignados a los actuales Pristidactylus y Liolaemus y constituyen los registros más antiguos para estos géneros. Los cambios climáticos y ambientales ocurridos durante el Neógeno en las áreas patagónicas habrían impactado diferencialmente sobre la fauna de escamosos, produciendo la retracción en la distribución de los teidos tupinambinos y las serpientes boideas y, contrariamente, la diversificación de los iguanios a ambos lados de los Andes. Adriana M. Albino.



     Ambientes Mésicos: Hábitats o sitios caracterizados por condiciones ambientales moderadas, es decir, ni definidamente húmedo (condiciones hídricas) ni seco (condiciones xéricas).




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