Sorprendente pero
real. El desierto de Atacama es un reservorio único para la preservación de
material extraterrestre, tanto meteoritos como micro meteoritos, materiales y
estructuras asociados a impactos de fragmentos de cuerpos asteroidales que
llegan a la Tierra, como da cuenta la excelente preservación del cráter de
impacto Monturaqui, datado en 600.000 años (Valenzuela et al., 2009).
Representa de esta forma un lugar particularmente interesante para el estudio
del flujo de material extraterrestre a la Tierra, y de procesos de impacto, los
cuales son considerados uno de los principales procesos geológicos presentes en
los cuerpos sólidos de nuestro Sistema Solar, y que han sido responsables de
extinciones masivas producto de su devastador efecto global en nuestro planeta.
Como nos demuestra
el trabajo presentado en el XIV Congreso de Geología, realizado en La Serena. En
el cual se indica que, durante diez años de búsquedas anuales sistemáticas de
meteoritos en el Desierto de Atacama ha revelado la existencia de superficies
muy antiguas y estables, capaces de conservar meteoritos con edades terrestres
tan antiguas como 2 millones de años, lo cual ha cambiado el paradigma de la
preservación de meteoritos en desiertos calientes alrededor del mundo. Los
meteoritos encontrados en este tiempo han ido completando la estadística
existente: del total actual (648), 92% corresponden a meteoritos rocosos, de
los cuales 89% corresponden a condritos ordinarios, 2% a condritos carbonáceos
y 1% a acondritos primitivos. El resto corresponde a 7% de meteoritos
metálicos, y 1% de meteoritos rocoso-metálicos, porcentajes comparables a los
obtenidos en los meteoritos de la Antártica (excepto por los metálicos, en que
el porcentaje en Chile es mayor). La alta densidad de meteoritos por km2
reconocida en algunos lugares (100 met/km2) se debería a superficies muy
antiguas e hiperaridez sostenida por millones de años. Las búsquedas y
colaboraciones con otros investigadores y coleccionistas privados han generado
nuevos descubrimientos de materiales de impactos, actualmente en estudio, y la
primera iniciativa de creación de una red de monitoreo de bólidos que será un
puente entre las ciencias de la Tierra y las del Espacio.
Pues bien ¿cuál
era nuestra condición (historia) en lo que respecta al tema de Meteoritos?
Hace 10 años atrás
(2005) la situación de los meteoritos en Chile era comparable a la de cualquier
país en Sudamérica. Los cerca de 60 especímenes declarados a la Meteoritical
Society habían sido principalmente encontrados por azar buscando menas de
minerales metálicos, en un periodo de tiempo que abarcaba casi 2 siglos, desde 1820
con el descubrimiento de la palasita Imilac, incluido en el tratado “Viaje al
desierto de Atacama” (Philippi, 1860) y en 1861, del mesosiderito Vaca Muerta,
el meteorito más grande en nuestra colección con 3,8 toneladas, del cual
Domeyko y Sandt publicaron reportes (Pedersen et al., 1992). Gracias a la labor
de algunos coleccionistas privados (Edmundo y Rodrigo Martínez) se retoma en
1983 la búsqueda de meteoritos y se redescubren las masas más grandes de Vaca
Muerta y otras de Imilac, a la vez que pequeños cráteres asociados a éstos
(www.museodelmeteorito.cl). El sitio conocido como Pampa, en la explanada de
Mejillones, era el único lugar que podría llamarse área de recolección densa
(Zolensky et al. 1995a), con cerca de 30 especímenes distintos recolectados en
un área de 30 x 15 km2 (meteoritos Pampa y La Yesera), pero hasta ese momento
Chile seguía siendo considerado como un lugar con bajo potencial de seguir
encontrando meteoritos (Scherer y Delisle, 1992), comparado con otros desiertos
como el Nullarbor o Sahara.
En lo que respecta
a nuestra experiencia (Caminantes del Desierto) y consideración.
Hemos sido
testigos y hemos encontrado alguno que otro vestigio y/o trozo de meteorito en
ciertos lugares muy acotados de nuestra comuna y región, los cuales, han quedado
obligatoriamente en el lugar. Sobre la recomendación de mantener en secreto estos
espacios es algo evidente que debemos hacer, sobre la imposición de no tocar
estos temas para no incentivar su búsqueda y colecta. Andá… No somos los descubridores
de la pólvora, esta información (ubicaciones)se encuentran totalmente detalladas
en la red para goce, uso y abuso público.
Sacada de Internet
Encontrado por Caminantes
Ahora y como corolario.
El caso chileno es
emblemático de cómo 1 solo grupo haciendo 1 expedición anual de 15 días ha
podido incrementar los hallazgos, en conjunto con aunar las iniciativas
privadas para no perder información, mientras los meteoritos aún no cuenten con
protección patrimonial. Pero la ventaja comparativa es la presencia del
desierto de Atacama como reservorio único en su tipo de este tipo de material,
que constituye una ventana para entender el flujo de material extraterrestre a
la Tierra a la escala del millón de años.
Algunos encuentros en la región de Antofagasta-Chile.
Para saber más:
Meteoritos Chilenos
Meteoritos del Médano
Pareciera que enseñar o informar resultara ser en algunos casos, un arma de doble filo, dependiendo del nivel de "educación" del receptor de determinados datos...
ResponderEliminarAlgunos nos conformamos con este tipo de información y con las imágenes; otros pueden quizás ir al lugar de la fuente del tema, y otros lamentablemente sólo irán a invadir y alterar el sitio...
Por su trabajo de recopilar datos e investigar para quienes nos interesan estos temas, sin ser entendidos ni profesionales...
Gracias...!
Pareciera que enseñar o informar resultara ser en algunos casos, un arma de doble filo, dependiendo del nivel de "educación" del receptor de determinados datos...
ResponderEliminarAlgunos nos conformamos con este tipo de información y con las imágenes; otros pueden quizás ir al lugar de la fuente del tema, y otros lamentablemente sólo irán a invadir y alterar el sitio...
Por su trabajo de recopilar datos e investigar para quienes nos interesan estos temas, sin ser entendidos ni profesionales...
Gracias...!